El Refugio Encanto Blanco, situado a orillas del Río Encanto Blanco, es perfecto para quienes buscan un escape en un entorno natural, tranquilo y con ambiente muy familiar.
Refugio Encanto Blanco: Un destino familiar en el corazón de los Andes
El Refugio Encanto Blanco es un lugar perfecto para quienes buscan una conexión directa con la naturaleza sin afrontar grandes desniveles, lo que lo convierte en una opción ideal para familias. Este refugio se encuentra al final de un sendero de aproximadamente 8 kilómetros que atraviesa paisajes impresionantes y brinda oportunidades para disfrutar de momentos únicos en el camino y en el lugar.
A medida que avanzás, alrededor del kilómetro 5, llegás al río de aguas cristalinas, un lugar que invita a detenerse, descansar y disfrutar de la tranquilidad que ofrece el paisaje. Cruzar el río es una experiencia memorable gracias a una de las icónicas pasarelas colgantes de la región, que se extiende de una orilla a la otra. El cruce requiere precaución: se recomienda hacerlo de a una persona por vez, sujetándose firmemente de ambos lados, ya que la pasarela se balancea con el movimiento de los pasos.
El camino también atraviesa un ñirantal antiguo que impresiona por su belleza. La sombra de estos árboles centenarios y la calma del entorno hacen que cada tramo del sendero se sienta como una invitación a desconectar del mundo y reconectar con lo esencial.
Una vez en el refugio, el ambiente es sereno y acogedor. Rodeado por la inmensidad de los paisajes característicos del Corredor de los Andes, el Encanto Blanco es el lugar ideal para relajarse y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro. Perfecto para una experiencia en familia, este refugio ofrece un espacio donde grandes y chicos pueden sumergirse en la magia de la Patagonia y crear recuerdos imborrables.